jueves, 27 de noviembre de 2008

Un violinista en el metro

Este correo me lo enviaron y la verdad que estoy impresionado,  les recomiendo leerlo.


Un hombre se sentó en una estación del metro en Washington y comenzó a tocar el violín, en una fría mañana de enero. Durante los siguientes 45 minutos, interpretó seis obras de Bach. Durante el mismo tiempo, se calcula que pasaron por esa estación algo más de mil personas, casi todas camino a sus trabajos.

Transcurrieron tres minutos hasta que alguien se detuvo ante el músico. Un hombre de mediana edad alteró por un segundo su paso y advirtió que había una persona tocando música.

Un minuto más tarde, el violinista recibió su primera donación: una mujer arrojó un dólar en la lata y continuó su marcha.

Algunos minutos más tarde, alguien se apoyó contra la pared a escuchar, pero enseguida miró su reloj y retomó su camino.

Quien más atención prestó fue un niño de 3 años. Su madre tiraba del brazo, apurada, pero el niño se plantó ante el músico. Cuando su madre logró arrancarlo del lugar, el niño continuó volteando su cabeza para mirar al artista. Esto se repitió con otros niños. Todos los padres, sin excepción, los forzaron a seguir la marcha.

En los tres cuartos de hora que el músico tocó, sólo siete personas se detuvieron y otras veinte dieron dinero, sin interrumpir su camino. El violinista recaudó 32 dólares. Cuando terminó de tocar y se hizo silencio, nadie pareció advertirlo. No hubo aplausos, ni reconocimientos.

Nadie lo sabía, pero ese violinista era Joshua Bell, uno de los mejores músicos del mundo, tocando las obras más complejas que se escribieron alguna vez, en un violín tasado en 3.5 millones de dólares. Dos días antes de su actuación en el metro, Bell colmó un teatro en Boston, con localidades que promediaban los 100 dólares.

Esta es una historia real. La actuación de Joshua Bell de incógnito en el metro fue organizada por el diario The Washington Post como parte de un experimento social sobre la percepción, el gusto y las prioridades de las personas. La consigna era: en un ambiente banal y a una hora inconveniente, ¿percibimos la belleza? ¿Nos detenemos a apreciarla? ¿Reconocemos el talento en un contexto inesperado?

Una de las conclusiones de esta experiencia, podría ser la siguiente: Si no tenemos un instante para detenernos a escuchar a uno de los mejores músicos interpretar la mejor música escrita, ¿qué otras cosas nos estaremos perdiendo?


La historia es veraz (no como mucha mierda tontera, que hoy en día la gente reenvía por email), de hecho que la historia completa se puede acceder desde la página del Washington Post.

Aquí les adjunto el video de paso.



Gracias a migue por el link al video en YouTube

jueves, 20 de noviembre de 2008

Historias de sacerdotes y políticos

HAY QUE APRENDER  A LLEGAR TEMPRANO  
  
Al  Padre Pascual le estaban haciendo su cena de despedida por 25 años  de trabajo en una Parroquia. Un político miembro de la comunidad fue  invitado para dar un breve discurso. 
  
Como el político  tardaba en llegar, el sacerdote decidió decir unas palabras él mismo  para llenar el tiempo. 
  
"Mi primera impresión de la Parroquia la  tuve con la primera confesión que  me tocó escuchar. Pensé que me había  enviado el Obispo a un lugar terrible,  ya que la primera persona que  se confesó me dijo que se había robado un  televisor, que les había  robado dinero a sus papás, había robado también en  la empresa donde  trabajaba, además de tener aventuras sexuales con la esposa  de su  jefe. También en ocasiones se dedicaba al tráfico y a la venta  de drogas. Y para finalizar, confesó que le había trasmitido una  enfermedad venérea a su propia hermana. Me quedé asombrado,  asustadísimo... Pero cuando transcurrió un tiempo, fui conociendo más  gente y vi que no eran todos así, vi una parroquia llena de gente  responsable, con valores, comprometida con su fe. Y así he vivido los  25 años más maravillosos de mi sacerdocio" 
  
Justamente en este  momento llegó el político, por lo que se le dio la palabra. Por  supuesto, pidió disculpas por llegar tarde y empezó a  hablar diciendo: 
  
"Nunca voy a olvidar el primer día que  llegó el Padre a nuestra Parroquia... De hecho, tuve el honor de ser el  primero que se confesó con él..." 

Moraleja: ¡Nunca llegues tarde! ¡La  puntualidad es un hábito valioso! 

martes, 11 de noviembre de 2008

Marimar, reencarnando a Thalía en un lipsync


Sugerencia: no ver el video si está conduciendo, manejando maquinaria pesada o anda con depresión.




miércoles, 5 de noviembre de 2008

Brfxxccxxmnpcccclllmmnprxvclmnckssqlbb11116

Unos padres de un niño sueco nacido en 1991, Elizabeth Hallin y Lasse Diding intentaron ponerle de nombre Brfxxccxxmnpcccclllmmnprxvclmnckssqlbb11116 a su hijo en señal de protesta, ellos no quisieron registrar el nombre de su hijo y cuando decidieron hacerlo(5 años más tarde) no les fue permitido y fueron multados.
Los padres alegaron que fue «Un desarrollo expresionista que visionamos como una creación artística», como el nombre no fue aceptado decideron optar por ponerle A, lo cual tampoco se aceptó y ademas se mantenía la multa.
En su primer pasaporte, el niño fue llamado «Icke namngivet gossebarn», que significa «pequeño niño sin nombre».


Visto en:
Wikipedia

lunes, 3 de noviembre de 2008

De vez en cuando veo publicidad colada entre otra publicidades



Qué toque la última de Apple, colocarse en publicidad de universidades de una forma no obstrusiva y discreta que ordena al subconsciente a comprar iPods, iPhones, iMacs iCuanta cosa se le venga en gana.